La periodoncia es el área de la Odontología que se encarga del estudio, prevención y tratamiento de aquellas patologías que afectan a los tejidos que protegen, rodean y sujetan los dientes: encía, hueso alveolar, ligamento periodontal y cemento radicular.

Es una enfermedad de origen infeccioso que está asociada a diferentes factores de riesgo como el tabaco, la diabetes, la predisposición genética y el estrés entre otros.

El acúmulo de placa bacteriana entre la encía y el diente crea como un bolsillo que son las bolsas periodontales donde se anidan las bacterias y se va acumulando el cálculo. Cuando estas bacterias son suficientes, nuestro sistema inmunológico genera una respuesta inflamatoria en la encía contra ella y como consecuencia, el hueso empieza a reabsorberse.

Los síntomas más comunes son: el sangrado al cepillado, la movilidad, halitosis, recesión, espacios negros entre los dientes o sensibilidad. Clínicamente, el sangrado al sondaje es indicativo de si la enfermedad está activa o inactiva, ya que un tejido inflamado es propenso a la hemorragia, mientras que la ausencia de sangrado en ejido previamente inflamados es indicativo de que ha habido una mejora del estado periodontal.

El tratamiento se basa en la eliminación de la placa bacteriana y el cálculo a través de :

1. Instrucciones de Higiene Oral (IHO), un 80% del trabajo lo realiza el paciente día a día en casa con una buena técnica y con la ayuda de la higiene interproximal.

2. Raspado y Alisado Radicular (RAR), un 20% es trabajo del periodoncista, quien detoxifica a raíz eliminando las bacterias y el cálculo que está adherido a ella. Se realizan en 2 o 4 sesiones de unos 45 min aproximadamente y al mes se evalúa la respuesta de los tejidos para ver la mejoría.

3. Terapia Periodontal de Apoyo (TPA), tras la eliminación profesional de la placa, las bacterias son capaces de nuevo de recolonizar las superficies dentales previamente limpias y aunque precisan un cierto tiempo para reorganizarse (9-12 semanas) si no se controlan, vuelven a producir lesiones. La TPA se realiza a intervalos de 3 a 6 meses para mantener controlados los factores de riesgo y estos intervalos dependen de la colaboración por parte del paciente (tiempo, técnica y utilización de cepillos interproximales)

• En función de la afectación y gravedad se precisarán de otras terapias para corregir las secuelas de la enfermedad como:

Cirugía Periodontal: eliminar los depósitos más profundos y eliminar bolsas.

Cirugía regenerativa: regenerar los defectos de hueso.

Cirugía estética periodontal: para ganar banda de encía en recesiones.

Las enfermedades periodontales son infecciones causadas por las bacterias situadas bajo la encía, en concreto entre la encía y el diente. La acumulación de bacterias bajo la encía, organizadas en forma de placa bacteriana (ahora se denomina biofilm dental), conduce a la inflamación de los tejidos adyacentes. Esto es, a la gingivitis (inflamación de la encía). Siempre que haya placa bacteriana habrá algún grado de gingivitis.

Para que la gingivitis progrese a periodontitis, son necesarios más factores:

• Bacterias más patógenas.
• Los factores genéticos.
• Estrés, consumo de alcohol, sobrepeso y, sobre todo, el tabaco.
• Enfermedades del resto del cuerpo como diabetes, osteoporosis o infecciones frecuentes por virus.
• La ingesta de ciertos medicamentos que producen aumento en el volumen o en la respuesta inflamatoria de la encía.
• Los malos hábitos de higiene de la boca, junto con la ausencia de cuidados profesionales.
• Presencia de dientes mal colocados o empastes desajustados.

Periimplantitis

Es la enfermedad inflamatoria alrededor del hueso que sostiene un implante dental. Está producido por una infección bacteriana y favorecida por una serie de factores de riesgo como el alcohol o el tabaco o incorrectos hábitos de higiene. Su manifestación más evidente es la pérdida de hueso y suele estar asociada a una inflamación adicional de los tejidos blandos circundantes.

¿Qué riesgos tiene una embarazada con enfermedad periodontal?

Debido a los cambios hormonales que se producen, durante el embarazo hay una cierta propensión sistémica a tener enfermedad periodontal.
La gingivitis del embarazo es muy común y afecta a entre un 60-75% de las mujeres embarazadas. Los signos de la enfermedad comienzan durante el segundo mes de gestación y alcanzan su pico máximo en el octavo mes.
Estos problemas orales se han relacionado con el peso bajo del bebé y el nacimiento prematuro. Las mujeres embarazadas deben someterse al tratamiento inmediato de la enfermedad periodontal para reducir el riesgo de complicaciones prenatales y postnatales.